La seguridad en la montaña

La grave y triste noticia del fallecimiento este fin de semana de tres guardias civiles durante el rescate de un montañero con un tobillo roto, nos lleva a insistir en la importancia de la seguridad en la montaña.

Ni siquiera insistiendo en la importancia de la seguridad estamos a salvo de tener un accidente y necesitar de la ayuda de las personas que juegan su vida en la montaña para salvar la de otros, pero quizás con más seguridad podamos reducir el número de salidas que tengan que hacer.

Todavía la semana pasada os enlazábamos las recomendaciones de la Federación de Montaña del Principado de Asturias sobre la seguridad en la montaña que os volvemos a dejar.

No obstante os recordamos aquí:

1. La montaña siempre está ahí, si las condiciones no son óptimas déjalo para otro día, siempre se puede volver.
2. Nunca intentes hacer más de aquello para lo que estás física y técnicamente preparado.
3. Asegúrate que tu mochila tiene todo lo imprescindible antes de salir de casa
4. Consulta las condiciones climatológicas antes de salir.
5. Avisa a dónde vas y cuándo tienes pensado volver.

Gracias a todos los profesionales que se preocupan diariamente de que montañeros y excursionistas tengamos la mejor asistencia posible en la montaña: Rescates, Refugios, Federaciones, Guías,...

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Trekkapp bajo el Naranjo de Bulnes (Vega de Urriellu) III

El amanecer del segundo día fue algo especial, salir fuera del Refugio de Urriellu y no ver casi nada, la niebla lo invadía todo, apenas se veían las tiendas de campaña de quienes habían vivaqueado en el exterior. Desde allí aún con la intensa niebla el Naranjo de Bulnes mostraba su imponente silueta como retándonos a subir.

Y a la puerta del refugio, dándonos los buenos días y recogiendo las migajas que se nos descuidaban de los bocados que sacábamos al exterior, había algunos acentores alpinos, haciendo despensas de grasa para tener reservas para lo que se les avecina.

La cosa no pintaba bien pero aún así decidimos que ya que habíamos salido a hacer un poco de Trekking había que moverse y ascender por una canal buscando la cara sur del Urriellu. Tuvimos que acabar abortando la ruta, puesto que cuanto más subíamos menos veíamos. Era agosto y nuestro pelo se escarchaba, y la sur se ocultaba. Así que muy a nuestro pesar tocaba dar la vuelta al Refugio.

Ese día ya no nos quedaba nada más que hacer, dejar colgados de la pared a los valientes que intentaban ese día escalar la Oeste queriendo hacer cumbre. Para nosotros esos dos días de senderismo o de Trekking tocaban a su fin.

Alguno suplió la pesadumbre de dejar atrás ese reino del silencio, tratando de fotografiar en el camino de vuelta la mayor diversidad de flores posibles de la zona, como refleja esta preciosa Euphrasia alpina subsp asturica.

Ya bajábamos pensando en cuándo podríamos volver, en qué condiciones y con la intención de en esa siguiente ocasión ascender a la cumbre del Urriellu, esa montaña mágica, única, imposible, que atrae las miradas de lejos y te embruja cuando estás así de cerca.

Nos fuimos pero el Urriellu seguirá ahí esperándonos, prometemos volver, contároslo con nuevas fotografías y equipar la ruta con Trekkapp, para que podáis seguir nuestros pasos, escuchar el silencio ahí arriba y disfrutar de las mismas sensaciones viendo la niebla pasar frente al Naranjo de Bulnes mientras estáis sentados al lado del camino.

Si pensáis subir os recomendamos reservar primero en el refugio, ya que a pesar de tener 96 plazas es posible encontrarlo lleno. Y no olvidéis que lo primero para la montaña es disfrutarla con seguridad y que la montaña no sepa que habéis pasado por allí.

Trekkapp bajo el Naranjo de Bulnes (Vega de Urriellu) II

Casi habíamos llegado, entre la niebla se vislumbraba el refugio y nos cruzamos con las abnegadas mulas y su guía que suben cada día para proveer el refugio de los víveres necesarios para que todo funcione correctamente en el refugio y que además de la cena y el desayuno te puedas tomar un café, una cerveza, o una de esas bebidas solubles con sabor a chocolate.

Sin duda hay que estar acostumbrado a estas montañas para que lo que para unos es algo que sale de lo cotidiano, sea para otros una rutina diaria.
Ya antes de llegar arriba nos saludaban las chovas con sus chillidos grupales y cuando llegamos a la puerta del Refugio de Urriellu allí nos estaban esperando para saludarnos. Un buen grupo de chovas piquigualdas varias de ellas anilladas como la de abajo.

El día había despejado, ya se veía todo alrededor y ese era el problema, para dónde mirar y dónde disparar la cámara, se me había olvidado en casa la segunda tarjeta de memoria así que había que pensar bien las fotografías que se podían hacer y borrar inmediatamente las que no estuvieran correctas.

Una vez arriba uno no puede estar quieto, miras detrás del refugio y ves El Picu, El Urriellu, El Naranjo de Bulnes, llamémoslo como lo llamemos impresionaba estar ahí y mirar hacia arriba viendo esa pared de unos 500 metros en vertical que parece que se cae encima de uno.

Y ya que estás hay que ir a investigar, pasar por delante del refugio, seguir de frente y subir al collao desde donde se ve el Jou SinTierre.

Pero no por mucho tiempo, era la primera visita a la zona y había que rendirle culto al Urriellu, moverse buscando diferentes perspectivas y fotografías, estudiarlo, analizarlo, admirarlo.

Dándose cuenta de que por aquí parece que todos los caminos llevan al Urriellu.

Y que hay más vida a sus pies de la que pudiéramos pensar.

Y cómo no, había que hacerse la foto, Rubén Álvarez, Sara López, Almudena Álvarez, Elena Rico y Juancho Aspra, todos junto al Refugio de Urriellu y bajo el Naranjo de Bulnes.

Esta vez no hubo ruta Trekkapp pero prometemos para un poco más adelante equipar la subida a la Vega de Urriellu como una ruta Trekkapp más.

Trekkapp bajo el Naranjo de Bulnes (Vega de Urriellu) I

Cuando planeas algo con tiempo esperas el momento en que llegue con ansias y cuando por h o por b has dejado apartado ese objetivo durante mucho tiempo sin saber porqué, las ganas son mayores cuando llega el día D. 

Con esas ganas arrancamos camino de dormir en el refugio de Urriellu, era nuestra primera aproximación al Picu, y en esta ocasión ni intención teníamos de grabar la ruta para Trekkapp, el único objetivo era subir, conocer la zona y disfrutar, para en otro momento pensar en objetivos mayores.

Si nada más que arrancas los paisajes son como el de arriba uno ya se anima a subir y si encima la compañía es como la de la foto de abajo, lo que va a costar es volver.

El tiempo es lo de menos tanto el cronológico como el climatológico, ninguno de los dos nos importa, subimos con calma, sin prisa, sabemos que tenemos tiempo y la niebla que se ve cada vez más cerca, no nos amedrenta, sabemos que en algún momento abrirá, aunque sea durante 5 minutos y nos permitirá ver esa pared que tantas veces hemos admirado en fotografías.

Eso sí por muchas que sean las ganas de ver el Urriellu no podemos dejar de admirar el impresionante paisaje que nos rodea en la subida, las canales por doquier por las que se precipitan las piedras y que parecen querer bajarnos a Bulnes, los caminos entre piedras, mientras vamos hablando de lo pequeños que nos sentimos y recordamos antiguas caminatas. En esta nos falta Laura, le habría encantado esta subida y alguno/a más.

Desde abajo la subida no parecía gran cosa, imaginamos que porque la niebla nos impedía ver lo que nos faltaba, pero a medida que subíamos y la niebla se iba disipando podíamos apreciar el esfuerzo pasado, pero cada paso, cada fotografía, merecían la pena.

Ya faltaba poco, la se veía la peña y cada vez eran más las ganas de encontrarnos debajo pero no por eso había que descuidar una mirada atrás, a lo que ya habíamos subido, por dónde otros bajaban y que nos dejaba imágenes tan maravillosas como la de abajo.

Tabayón del Mongayu

Sin duda el Parque Natural de Redes, también Reserva de la Biosfera, es un rincón fantástico de Asturias, un lugar en el que el agua domina por todas partes y la vegetación se vuelve exuberante, y en el que desde las zonas más bajas hasta las mayores alturas la vegetación se reparte ocupando cada especie su nicho y ofreciendo una buena representación de nuestra Tierra.

El Tabayón del Mongallu es sin duda un lugar representativo de la zona media alta de Redes. Se trata de la cascada más alta de Asturias que desde la zona más alta donde empieza a rebotar hasta abajo tiene unos 130 metros de altura.

Llegar a ella supone disfrutar de un camino asequible y tranquilo por un precioso hayedo, aquí la altitud limita el crecimiento de otras especies por la dureza de la climatología invernal.

El hayedo sumido en la humedad de la niebla es el rey de estas alturas. Son muchas las especies a destacar en este recorrido de las que con trekkapp podemos ir teniendo información de forma gratuita, pero sin duda es de destacar la gran variedad de líquenes algunas de cuyas especies nos indican una gran pureza del aire. Vamos un lugar para llenar los pulmones de aire limpio y desintoxicarlos un poco de tanta ciudad.

Y tras ese paseo tranquilo llegamos ante la cascada, que ya la vemos de lejos, antes de acabar casi de salir del bosque. El camino se mete entonces entre una zona de piornal, para dar a una pradera que se convierte en un buen sitio para parar a comer bien ahora o a la vuelta de la cascada y que es donde después nos desviaremos del camino inicial.

El suelo de la zona es de carácter ácido, lo que limita las especies que viven aquí y encontramos dominado por brezales y tojos, como la Erica arborea de la foto inferior aunque esa es del Sueve.

El camino de vuelta será diferente al de ida, nos desviaremos en la zona de pastizal para bajar en dirección a la carretera del puerto de Tarna, cruzando el bosque y viendo algunas interesantes formaciones geológicas, explicadas por la geóloga Laura Llera. En esta zona en otoño, al atardecer, es posible que no veamos ciervos pero si que su bramidos nos abrumen llegados de todos lados a nuestro alrededor.

Si has hecho esta ruta y te ha gustado coméntanoslo aquí o déjanos comentarios de otras rutas de las que quieras saber más.
Y si el Viernes 22 de Agosto de 2014 estás libre por Asturias y te apetece ven con nosotros a realizar esta ruta guiada por nuestro biólogo y de forma gratis si llevas Trekkapp descargado en tu móvil.

La ruta del Alba, por Elena Rico

A finales de Mayo de 2013 realizábamos con Trekkapp de forma presencial y guiada la Ruta del Alba, a ella asistieron unas 40 personas, entre ellas Elena Rico, propietaria y gerente de las Casas del Campo, que nos envía su visión de esa ruta, con las fotografías que hizo ese día de la misma. Si queréis conocer las Casas del Campo, sólo tenéis que hacer click en el banner inferior.

"Veo la posibilidad de dejar un post sobre una de las rutas realizadas con Trekkapp y no la voy a desperdiciar.

No tanto por dejar mi enlace aquí, que estas cosas son muy interesantes por aquello del SEO ;), sino por el hecho de colaborar con un proyecto que me parece muy interesante.

Llevo tiempo saliendo a hacer rutas con esta aplicación, he de confesar que mi móvil es iPhone y que no la tengo descargada, pero como siempre voy con alguna amiga que tiene Android, hacemos uso de su dispositivo móvil.

La mayoría de las veces salimos con Juancho, el guía profesional que ha creado esta aplicación, quien nos suele dar amplias explicaciones más sobre todo lo relativo a la naturaleza. Y ya hemos constituido un buen número de seguidores Trekkapperos, que nos juntamos y quedamos para hacer las rutas cada 15 días más o menos.

Ya nos hemos hecho amigos. Y esto es una de las mejores cosas.

Pero aparte de este maravilloso hecho, las rutas en sí mismas están fenomenal, muy detalladas, incluso la manera de llegar al punto de partida; cosa muy útil para personas que como yo nunca se toman la molestia de buscar qué carreteras tomar para llegar a la ruta.

Una de las rutas que más me gusta de Asturias, pensando en la accesibilidad es la del río Alba, porque tiene 5 kms asfaltados, por los que puede circular cualquier tipo de silla (de ruedas, de bebés,...) una persona mayor con movilidad reducida, niños... Y a la vez es un paisaje natural precioso.

La ruta empieza y acaba en un pueblo muy bonito auténticamente rural y asturiano. Su conjunto etnográfico bien merece ya la visita.

A 5 kms el camino se hace menos transitable, con escalones y el terreno de tierra y piedra, con vistas de cascadas muy bonitas. Pero aunque ya no puedan circular las personas con limitaciones sí que pueden hacerlo niños que se valgan por si mismos, porque la dificultad en cuanto a pendiente y a distancia (2kms más) es pequeña.

 Por este motivo, que es apta para todos los públicos, casi en su totalidad, y porque es muy bonita en cuanto a entorno natural, es una de las rutas asturianas que yo recomendaría a todo el que no la haya hecho nunca.

Otro día te hablaré de alguna ruta más que también me gusta mucho pero ya a otros niveles de accesibilidad.

Muchas gracias a Elena Rico por tomarse la molestia de escribirnos este blog, si queréis enviarnos vuestra opinión de alguna ruta podéis enviárnoslo a newsletter@trekkapp.com

¿Os apetece realizar esta ruta? Sólo tenéis que hacer click en el banner inferior desde vuestro móvil o tablet y os llevará a la Google Play para poder descargarla GRATUITAMENTE.

La Ruta del Alba: El Agua.

La pista de hormigón son unos 5 kms que nos permiten realizar la ruta incluso con silla de bebé o con una silla de ruedas, a partir de ahí nos quedan 2 kilómetros de sendero de montaña con suelo de tierra y roca mucho más estrecho constreñido por la garganta de roca, una alternancia de calizas y cuarcitas que tiene su importancia en el paisaje como nos cuenta Trekkapp.

En este paisaje es el agua quien se ha encargado a lo largo de millones de años, de ir tallando estas rocas poco a poco para producir esta garganta, salpicada de saltos de agua por todos lados. Algunos como el de abajo, moderados.

Otros como este algo mayores, que vienen desde muy arriba buscando precipitarse de manera lateral al río.

En ocasiones no son más que pequeñas discontinuidades del río, eso sí acabadas en preciosas bañeras como esta tras un pequeño tobogán.

En otras como esta se trata de una cascada de algo más de importancia, de gran belleza y además obligando al camino a apartarse y dejándonos imágenes preciosas de esta cola de agua en medio del bosque y la roca.

Al final el camino se abre a una zona amplia, junto a la cabaña o refugio de pastores, lugar en el que la gente suele reunirse para comer, dominado por la caliza en primer término y algunos arbustos como el saúco o sanalotodo del que se habla en la aplicación, junto con muchas otras especies de animales y plantas.

Si miramos arriba, las montañas y los bosques lejanos nos indican que sólo hemos caminado un poco, que el monte que nos rodea es igual de espectacular e invita a seguir caminando.

No obstante Trekkapp se da la vuelta aquí, damos por finalizada la ruta del Alba. Para otro día un poquito más.

Desde luego si queréis disfrutar de esta ruta con todos los contenidos que tiene nada mejor que descargar completamente gratis nuestra aplicación Trekkapp y dentro de ella esta ruta o cualquier otra que queráis.

Y si ya la tenéis, habéis hecho alguna ruta y la queréis compartir con todos nosotros podéis hacerlo en este blog de la siguiente manera: envíanos el texto y las fotografías que quieras que incluyamos a info@trekkapp.com e indícanos si quieres que aparezcan tus datos o no.

La Ruta del Alba: El uso del Territorio

La ruta del Alba, no es sólo paisaje, también es tradición y uso de un valle fluvial y unas montañas desde muy antiguo. Eso se nota casi a cada paso del camino, un camino que hoy en día es fácilmente transitable por una pista de suelo hormigonado muy fácil de andar, pero que en el pasado tenemos que imaginarlo seguramente como caminos embarrados y estrechas veredas por las que llevar los animales a los pastos altos en verano. 

Aún hoy podemos encontrarnos esos movimientos de ganado pero más cómodos de hacer, mientras los pastos bajos quedan durante el verano para segar y curar la hierba, que veíamos guardada en las tenadas (pajares) para forrajear a los animales en invierno.

Pero la tierra aquí es muy generosa a la par que dura y además de agua por doquier y buenos pastos y un valle fértil también dio mineral. Asturias es una tierra minera y excavando en sus entrañas se extrajo de esta zona en el pasado pequeñas cantidades de cobre, y en mayor medida hierro. 

Si nos dejamos guiar por Trekkapp y vamos un poco más arriba encontraremos algún abrevadero como este, lugares preparados para que el ganado pudiera beber sin necesidad de meterse en el río y que suponían obras de traída de aguas de puntos situados más arriba aprovechando algunos manantiales de la zona.

Sin duda, caminar por la senda del oso supone un viaje al pasado, en el que la vegetación y la roca lo ocupan todo salvo el hormigón que pisan nuestros pies. Los cierres a base de troncos de madera clavados unos a otros son también una muestra del arduo trabajo que conllevaba el campo y que aún hoy persiste en alguna de estas aldeas asturianas.

Desde luego si queréis disfrutar de esta ruta con todos los contenidos que tiene nada mejor que descargar completamente gratis nuestra aplicación Trekkapp y dentro de ella esta ruta o cualquier otra que queráis.

Y si ya la tenéis, habéis hecho alguna ruta y la queréis compartir con todos nosotros podéis hacerlo en este blog de la siguiente manera: envíanos el texto y las fotografías que quieras que incluyamos a info@trekkapp.com e indícanos si quieres que aparezcan tus datos o no.

La ruta del Alba: Etnografía para comenzar.

La ruta del Alba es una de esas rutas que todo el mundo conoce y que cuando visitamos Asturias siempre nos suena. Situada en el Parque Natural y Reserva de la Biosfera de Redes, es uno de esos lugares casi mágicos en los que el río Alba la vertebra y se rodea de Bosques de ribera y de enormes paredes de montañas, que se levantan sobre nuestras cabezas y que obligan al agua a numerosos saltos de diferentes alturas a lo largo de la excursión.

Como no os recomendamos que antes de realizar esta excursión os descarguéis desde casa la aplicación y la ruta, para que Trekkapp os cuente lo que vais viendo. Un guía en vuestro móvil y GRATIS.

Comenzamos la ruta en el pueblo de Soto de Agues, la gran afluencia de gente que suele tener esta ruta se hace patente en el gran aparcamiento que tiene este pueblo de dimensiones no tan grandes. 

Sin duda el paseo inicial por el pueblo de Soto de Agues a poco que nos fijemos es casi un museo etnográfico vivo. No tanto por los utensilios en sí que en parte también, sino porque podemos apreciar un modelo de integración de los elementos naturales del entorno, casi a cada paso del camino.

Las montoneras de leña de árboles caídos del entorno se apilan cortadas bajo hórreos y tenadas que guardan la hierba seca para alimentar al ganado en el crudo invierno. El puente de piedra que hace seguramente cientos de años se construyó con las piedras caídas de las montañas circundantes.

Esos cierres tradicionales de entretejido de varas finas de avellano que solían utilizarse para cierre de tenadas (pajares) y que cada vez resultan menos frecuentes.

Y cómo no la etnografía no estaría completa sin uno de los lugares más importantes del pueblo, sino el que más, el agua. La fuente, lavadero y en ocasiones también abrevadero era el lugar de reunión más importante del pueblo.

Quizás no todo el mundo acudía a la iglesia, pero sí a por agua, a lavar, a abrevar al ganado y ello hacía que fuera casi como el centro social del pueblo, donde juntarse a charlar, debatir temas de interés,...

En definitiva que no podemos ir a la ruta del Alba, pasando Soto de Agues de largo, merece la pena fijarse bien en cada punto del camino, llevar la ruta descargada con Trekkapp para que nos vaya contando estas particularidades y disfrutando del paisaje mientras no nos cuenta nada.

Continuará.... La Ruta del Alba: El uso del Territorio y La Ruta del Alba: El Agua.

Si quieres ver aquí tu post de una ruta Trekkapp que hayas hecho envíanos texto y fotografías que quieras que incluyamos a info@trekkapp.com e indícanos si quieres que aparezcan tus datos o no.